La teoría es la misma…. la escala diferente

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SE parecen pero no es lo mismo

 

Los personajes en cuestión tienen nombre apellido y currículas diferentes… Manlio Flabio Beltrones, Enrique Peña Nieto, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz y Arturo Zamora Jiménez… para quien no los ubica hay que ir al enlace que Circulo de Jalisco ofrece en los nombres con detalles de wikipedia…  Unos a  nivel Federal y otros a nivel estatal en Jalisco. Uno Gobierna y otro trabaja de RP… bueno por lo menos así loo estamos percibiendo… claro está que hay terceros abordo de los equipos pero ahí si la teoría de aplica diferente….

Las estaturas de los personajes son distintas, así como las escalas de sus experiencias… la conformación de la dupla obedece a los espacios de gobierno que pueden operar… los respetos en las convocatorias gracias a su presencia y personalidad son las claves para que el Estableshment los tenga donde estan… Ya no son becarios, ya son operadores de escalas importantes… sus carreras políticas han escalonado los diferentes procesos que en un asenso los tienen ya en los reflectores de la sociedad (gracias a los medios) y del Gobierno gracias a sus partidos y alianzas…

En un México que requiere de estabilizadores sociales más allá que de administración pública, estos personajes son muy importantes en este momento para la vida de las comunidades que representan. Mas que servidores públicos se les ve como los ordenadores de gobierno ante la sociedad y operadores políticos ante las fuerzas que son las que equilibran o mantienen órdenes sociales, financieras, clericales, y de todas las oligarquías que operan hacia dentro y fuera de Jalisco y México….

La teoría de gobernabilidad es la misma… las escalas son distintas… pero lo que hay que remarcar es que los espacios de la acción simplemente no son comparables, por lo que en la justa medida de nuestra visión también las Misiones son muy diferentes a la hora de operar…

Alvaro López

Coordinador Editorial del Proyecto ICONO

Retos de Tonatiuh Bravo frente a la UdeG

AUMENTAR LA MATRICULA…

RETO DE TONATIUH BRAVO

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Asumirá la Rectoría General de la UdeG el próximo 1 de abril. Sus prioridades serán la calidad académica, la investigación y la difusión cultural

Redacción / Política Fotos por Víctor Salcedo

Tonatiuh Bravo Padilla fue elegido como el nuevo Rector General de la Universidad de Guadalajara para el periodo 2013-2019. Obtuvo 106 de los 182 votos emitidos por los miembros del Consejo General Universitario durante la sesión extraordinaria que se realizó en el Paraninfo ‘‘Enrique Díaz de León» y que fue presidida por el actual rector Marco Antonio Cortés Guardado.

Bravo Padilla será el rector número 49 de la institución.

La candidata Ruth Padilla Muñoz, directora del Sistema de Educación Media Superior obtuvo 36 votos; Héctor Raúl Pérez Gómez, del Centro Universitario de Ciencias de la Salud logró 24 votos, y Pablo Arredondo Ramírez, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades acumuló 16 sufragios.

La sesión duró casi tres horas y transcurrió sin incidentes. Los consejeros votaron en una urna y finalmente el cómputo se realizó delante de todos los asistentes.

Tonatiuh Bravo Padilla será el próximo Rector General de la Universidad de Guadalajara.

Politica

Bravo Padilla, rector del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (Cucea), deberá tomar posesión de su nuevo cargo el próximo día 1 de abril para desempeñarlo hasta el 31 de marzo de 2019.

LAS PRIORIDADES

Durante su próxima gestión al frente de la Universidad de Guadalajara, Tonatiuh Bravo dará prioridad a la calidad académica, la investigación y la difusión cultural; aumentará la matrícula, gestionará más presupuesto para resolver el déficit institucional y buscará mayor vinculación con los sectores gubernamental, social y productivo.

Durante una rueda de prensa que ofreció después de que tuvojugar la elección de nuevo Rector General, dijo que las propuestas de\ todos los candidatos serán integradas en su programa de trabajo, pues son «una plataforma que pone a la Universidad en un análisis al día, y en la perspectiva de la construcción de la agenda institucional». Bravo Padilla subrayó la necesidad de que la institución genere consensos entre los poderes públicos en un clima institucional, pero también mantenga una posición crítica, «lo cual no descarta la posibilidad de construir acuerdos y soluciones».

Destacó que el papel de la UdeG es académico. «Tiene que atender a poco más de 236 mil estudiantes. La Universidad de Guadalajara en primer lugar, deberá cumplir satisfactoriamente sus funciones sustantivas de docencia, investigación, extensión y difusión de la cultura».

Añadió que seguirá con las gestiones para conseguir más recursos De hecho, el mismo viernes 1 de febrero en que se realizó la elección, el secretario general Alfredo Peña y el propio Bravo Padilla viajaron a la ciudad de México para entrevistarse con funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a fin de dar seguimiento a este asunto.

«Nosotros lo que queremos es que el Gobierno del Estado, pero sobre todo el Gobierno Federal, valore, verifique los indicadores académicos y se dé cuenta de que la institución es plenamente competitiva, con indicadores que tienen las denominadas universidades nacionales», y precisó que «evidentemente, el tratamiento no puede ser el mismo porque las universidades federales sólo reciben recurso federal, no reciben recurso estatal. Entonces, aquí en este caso, lo único que queremos nosotros es que nos equipare en lo que corresponde al recurso federal que se aporta a los montos y porcentajes de incremento que les otorga a estas instituciones».

En sus propuestas de campaña ofreció crear un consejo científico para la toma de decisiones para la investigación, incrementar la atención educativa en el estado, rediseñadar la política de vinculación con la sociedad y el sector productivo, y mejora de los salarios a los trabajadores universitarios.

BREVE SEMBLANZA

Tonatiuh Itzcóatl Bravo Padilla es licenciado en Economía por la UdeG (1982); master en Administración Pública por la Universidad de Nuevo México (1992), y doctorante en Sociedad de la Información y el Conocimiento por la Universidad Abierta de Cataluña.

Fue líder estudiantil y ocupó los cargos de presidente de la Sociedad de Alumnos de la Facultad de Economía y posteriormente de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (1985-1988).

Dentro de la UdeG ha ocupado diversos puestos administrativos y académicos, entre ellos: director de Comunicación Social, coordinador general de Extensión Universitaria, director del Sistema de Educación Media Superior, rector del CUCEA y vicerrector ejecutivo.

Es miembro del PRD y fue candidato a la alcaldía de Guadalajara en 1997; el triunfo fue para el panista Francisco Ramírez Acuña, pero Bravo Padilla se incorporó al Ayuntamiento como regidor.

Ha sido diputado federal por Jalisco en dos ocasiones: 1994-1997 y 2006-2009, en esta última fue presidente de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos. S

LOS MAS RECIENTES

Los últimos 10 rectores que ha tenido la Universidad de Guadalajara, en los últimos 47 años, son los siguientes:

  • Ignacio Maciel Salcedo (1966-1971)
  • José Parres Arias (1971-1973)
  • Rafael García de Quevedo (1973-1975)
  • Enrique Zambrano Villa (1975-1983)
  • Enrique Alfaro Anguiano (1983-1989)
  • Raúl Padilla López (1989-1995)
  • Víctor González Romero (1995-2001)
  • José Trinidad Padilla López (2001-2007)
  • Carlos Briseño Torres (2007-2008)
  • Marco A. Cortés Guardado (2008-2013)

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Política por Gonzalo Leaño

Politica 502

GLRREFLEXIONES

¿Otros 50 partidos políticos nacionales?

Gonzalo Leaño Reyes

Al cerrar el período para solicitar el registro legal de nuevos partidos políticos nacionales, el asombro es que 50 organÍ2aciones, personas o membretes, quedaron apuntados para obtener registro como nuevos partidos políticos nacionales.

La sola lectura del listado no permite captar si tamaña abundancia obedece a un inusitado fervor democrático o más bien a buscar la migaja del subsidio.

Injusta sería la descalificación prejuiciada de cada una de las solicitudes, es posible que algunas en realidad respondan a formas de pensar, a proyectos de país que no han sido tomados en cuenta hasta ahora; o que alguna otra tenga en sus motivaciones importantes y posibles proyectos de nación que no empatan con lo profesado o expuesto por los siete actuales partidos nacionales con registro.

Sabemos que en política las derechas, izquierdas y centros tienen tantas modalidades y matices, que resulta difícil para cualquier partido político sostener por mucho tiempo unidos a quienes cada día ahondan más sus diferencias en cuanto ideas o prácticas políticas.

Se supone que los partidos políticos nacionales surgen a raíz de compartir una forma de pensar,’ respecto a los asuntos comunes. Pero también puede surgir la unidad ante un proyecto práctico propuesto para resolver un problema colectivo.

En estos tiempos, la “real política’, lo práctico, ha desplazado con mucho a la política de creencias. Al bajar las discusiones ideológicas, para algunos, los partidos mayoritarios pierden atractivo.

La urgencia con la que presionan los grandes problemas nacionales elimina de inmediato las ganas por las profundas discusiones bizantinas, para encaminar todas las energías a buscar coincidencias que permitan frentes más amplios y efectivos.

Entre quienes militan en los partidos, la idea de que los problemas en las democracias se resuelven con más democracia, les hace moverse hacia el centro, donde pueden encontrar mayores coincidencias y menos creencias irreconciliables.

Se supone que cada partido obedece a diferentes formas de pensar, a diferentes proyectos de país, pero todos dentro de la solución democrática.

Con la intención de participar, de respetar lo básico de la democracia formal, en el sistema caben muy diversas formas de pensar y los más diferentes proyectos.

El simple sentido común nos indica la necesidad de que nuestro país abra las posibilidades de aspirar al poder por la vía electoral a más y más grupos significativos en el país. En una democracia no existe una sola verdad, ni un proyecto único. En una democracia conviven y compiten, en libre juego civilizado, las verdades de cada quien y los proyectos, con apoyo de cada grupo importante.

En ese sentido, deberíamos saludar con entusiasmo la existencia de 50 diferentes conjuntos de ideas políticas aplicables a nuestro país, así como de otros 50 proyectos a considerar. Pero pienso que no es ese el caso de lo que comentamos.

La paradoja es que tenemos en nuestro país un severo problema de falta de participación de los ciudadanos en los partidos y agrupaciones políticas, mientras que a la hora de aspirar al subsidio aparece súper abundancia de nuevos proyectos.

Quizá eso nos vuelva a hablar del exagerado individualismo que padecemos como país, el severo problema de trabajar en equipo y mantenemos unidos, así  como la desidia para siquiera pensar en la obligación humana  parta con nuestra comunidad, para con nuestra ciudad y  para con nuestro país. Quizá estemos minado el surgimiento de la aspiración egoísta; “Cada mexicano un n partido”